
Hoy para celebrar que ya llega el fin de semana, hemos querido darle un toque cítrico a un postre tradicional y casero. Os traemos una receta tan fácil que incluso es apta para prepararla con los más peques de la casa: el flan de mandarina. Se trata del flan de huevo de toda la vida con un toque refrescante y sustituyendo la leche por zumo de mandarina. De esta forma, juegas con ventaja si tienes alguna persona de tu alrededor que tenga intolerancia a la lactosa.
Además, está riquísimo, es saludable y disfrutarás de una de las frutas de temporada que nos encantan.
Receta del flan de mandarina
Toma nota de los ingredientes y manos a la obra.
Ingredientes
– 5 huevos
– 140 g de azúcar
– 500 ml de zumo de mandarina
– Media mandarina
– 3 cucharadas de azúcar para hacer caramelo
– Ralladura de naranja
Elaboración
- Empezaremos preparando el caramelo. Para ello, pondremos el azúcar en una sartén antiadherente a fuego medio-alto. Añadiremos unas gotas de agua y dejaremos que se funda hasta que adquiera un tono dorado.
- Tras esto, lo verteremos en el fondo de los moldes o flanera repartiéndolo bien por toda la base.
- Seguiremos exprimiendo el zumo de la mandarina y colándolo hasta retirar la pulpa bien. Lo reservaremos.
- Batiremos los huevos junto con el azúcar en un bol durante un par de minutos hasta que veamos que se han blanqueado. A continuación, iremos incorporando el zumo poco a poco sin dejar de batir hasta que hayamos conseguido una mezcla totalmente homogénea.
- Con la mezcla hecha, pondremos el horno a precalentar a 190º, mientras la vertimos en los moldes o flanera a los que previamente habíamos incorporado el caramelo.
- Colocaremos los moldes o la flanera dentro de otro recipiente más grande con agua para poder cocinarlos al baño María. Introduciremos en el horno a 190º durante 45 minutos o hasta que el flan cuaje. Si vas a utilizar moldes individuales, deberás tener en cuenta que se harán en menos tiempo.
- Por último, retiraremos del horno, dejaremos enfriar a temperatura ambiente, y reservaremos en la nevera un mínimo de 4 horas. Para servir, desmoldaremos dándole la vuelta, y decoraremos con gajos de mandarina troceados al gusto y ralladura de naranja, así como caramelo por encima. ¡Bon appétit!